Como consolidar y mejorar el funcionamiento de un almacén logístico de un TIER-1
Recomendaciones y soluciones tecnológicas para asegurar un excelente nivel de servicio automatizado en un almacén del sector auxiliar del automóvil.

En el proceso de externalización de funciones de los fabricantes de automóviles hacia sus TIER-1, se ha extendido también la responsabilidad de proveer los materiales necesarios según los tiempos que marca su método productivo JIT. Eso conlleva que quien debe gestionar la presión de la flexibilidad del stock es el TIER-1.
Una de las máximas del JIT es minimizar el stock. Por ello, una compañía TIER-1, dispone siempre de una instalación cercana a las instalaciones del fabricante ya que necesita bajos tiempos de reposición. Esta instalación puede tener o no funciones de producción del producto a suministrar, pero con total seguridad tiene la función de almacén logístico.
Cualquier compañía del sector del Auxiliar del Automóvil debe dar un servicio excelente a sus clientes ya que, a nivel mundial, solamente tiene poco más de una docena de posibles clientes potenciales. No se pueden permitir fallos. El almacén logístico tiene una importancia crítica ya que a ojos del cliente es el punto de aprovisionamiento, con lo que un fallo en esta instalación tiene difícil resolución.
Hace ya un tiempo que la automatización se ha demostrado una gran ayuda para la gestión de almacenes, con ello se han reducido los tiempos de respuesta con producciones menores, minimizando esfuerzos y fallos de trazabilidad. Ahora bien, esta evolución también conlleva sus riesgos, contar con maquinaria y dispositivos implica, que ante cualquier comportamiento imprevisto se debe poder investigar qué está pasando y cómo volver al estado anterior.
Esta falta de conocimiento del estado de la instalación tiene un especial riesgo en un TIER-1 por lo antes comentado. Si no se disponen de las herramientas adecuadas, cualquier problema en dispositivos o sistemas que no se resuelvan con un recambio puede conllevar descoordinaciones o retrasos que conlleven incumplir con el cliente. Por ello para poder asegurar un excelente nivel de servicio automatizado, se aconseja siempre disponer de:
- Conocimiento de las comunicaciones
Las comunicaciones son una parte del sistema que está ligada a todos los dispositivos en general y a ninguno en concreto, con lo cual, si dan problemas siempre es difícil rastrear por dónde vienen. Actualmente, las comunicaciones más utilizadas a nivel de almacenes son los buses de campo Profibus y Profinet.
Paradójicamente, aunque su uso es masivo, el conocimiento sobre ellos en caso de problemas es escaso. Disponer de herramientas de análisis continuo y de diagnóstico rápido, junto a tener conocimiento sobre la tecnología se estima imprescindible para asegurar su correcto uso y avanzarse a los posibles problemas que pueden surgir en estas redes.
- Posibilidad de Fast Recovery de los controladores
Un alto nivel de automatización implica tener muchos controladores o PLCs por el almacén que gestionan las operaciones y coordinan los demás dispositivos.
De la misma manera que las comunicaciones, un fallo de éstos no se recupera con un recambio. Habitualmente, en un almacén logístico se presentan dos tipos de fallos en los PLCs. :
- El primero es que ‘alguien’ ha modificado el programa y éste tiene fallos o errores, en ese momento se debe volver a la programación anterior y o no se tiene guardada o no se ha documentado que cambios se han realizado.
- El segundo problema clásico es que el PLC se avería y se requiere instalar otro con el programa que estaba corriendo en el averiado.
En ambos casos, la solución pasa por disponer de un sistema de gestión de backups con capacidad de detectar cambios en los propios programas.
- Disponer de un HMI con las posibilidades actuales
No todas las áreas de un almacén (muelles de carga y descarga, picking, almacenaje, pedidos, manipulación, expedición, …) tienen el mismo grado de automatización, sino que parte del trabajo es necesario que sea manual. Ahora bien, todo el proceso debe estar coordinado perfectamente. Por ello, en las zonas de trabajo manual se deben utilizar herramientas que permitan integrar la información de éstas con el sistema de gestión integral del almacén y a su vez permitir un método de interacción ágil e intuitivo entre el panel y el operario.
Esta función ha sido cubierta tradicionalmente por los HMIs, pero éstos ya han dejado de ser una pantalla aislada donde solamente se pueden mostrar datos sin apenas capacidad de lógica. Hoy por hoy existen potentes herramientas que cuadran perfectamente con las necesidades de un almacén logístico.
A un HMI local, un TIER-1 le debe exigir:
- Ser estándar.
- Con capacidad de integrarse con multitud de PLCs y también de sistemas de gestión y BBDD.
- Visualmente potente
- con capacidad de lógica para enviar alarmas o reaccionar ante un evento
- a ser posible, que permita ser lo más reutilizable posible para poder instalarlo en los diferentes almacenes de la compañía.
Disponer de este tipo de soluciones no solo evita incidencias, sino que también consolida la automatización del almacén de tal manera que, al ser las incidencias menores, el propio stock interno también se podrá disminuir, con las ventajas económicas que esto comporta. Yendo un paso más allá, se dispondrá de toda la información bien almacenada para poder incorporar herramientas de BigData y anticiparse a las necesidades del cliente o a los posibles problemas internos que puedan surgir.
Si desea obtener más información sobre nosotros o sobre nuestras soluciones enfocadas a cómo mejorar la automatización y digitalización de un almacén, no dude en visitarnos en el matcongress o pedirnos más información.